viernes, 20 de abril de 2012

Como no vivir de la Chaqueta

Mis estimados amigos sigo vivo y con mucho sueño. Pues dejen les cuento que me la he pasado en súper putiza loca estudiando y haciendo cuanta mamada se imaginen, y sí imaginense de todo tipo de mamadas que al fin y al cabo nada ha sucedido en realidad. Y es que en ocasiones pasa que parece que un tu vida nada sucede, pero todo pasa en realidad frente a tu maldita jeta de adicto. Resulta que ahora vivo en una casa con varios vecinos muy pecualiares acá en un nuevo lugar de este amado México.
Nos cambiamos de lugar de residencia, y con ello... viene la debacle. Y empieza uno a preguntarse si es que es buena idea cambiar de aires y comenzar de nuevo a vivir por otro lado. Aunque digan que no, cambia un chingo todo, la comida, la forma de hablar e invariablemente la forma de relacionarse. Pero invariablemente a donde vayamos seremos presas del rumor como forma de violencia muy contundente y exclusión anunciada. Es decir, en todos lados existen los pinches metiches y los habladores odiosos. Eso por un lado, por otro, la compañera fiel de cada hombre que se respete y se precie de ser machin: La Chaqueta. Sí, la chaqueta aquella compañera fiel que se respeta incluso por encima de algunas rucas que de seguro al leer esto me rayaran la madre.
Pero eso en realidad va mucho más allá de la chaqueta y el chisme como opresor de los que venimos de fuera. Es decir, se trata de toda una serie de códigos que nos hacen vivir fuera de nuestro seno familiar, y nos dan fuerza para seguir adelante en medio de gente que se comporta diferente y se agasaja hablando babosada y media de ti. Y esa fuerza, proviene de la Chaqueta.
Cuantas veces no has estado agobiado y ¿quién sale para alivianarte de verdad?, cuantas veces no tienes un chingo de presión por un chingo de compromisos que agarraste pus porque no sabías que se iba a poner tan perro y ¿quién te dio la claridad para pensar? la Chaqueta. Lo sé, suena bastante simple, pero es algo real, aquel que diga que no, francamente se pierde de un muy buen aliviane.
Pues mi teoría radica en ello. la chaqueta decía el famoso "Carlangas", es una sensación, una situación o una forma, pero no es sólo una chaqueta, sino que tiene un objetivo, se mira con respeto y te da mucha felicidad y placer, si lo pensamos bien.
Y como no vivir de ella. Echenle lápiz y verán que está mucho mas presente de lo que creemos. Es sólo una relfexión para comenzar este mes de abril de 2012, que como dijo el joto patas chuecas del maussan, el mundo se va a acabar.